El 21 de noviembre de 1935, TOMÁS PÉREZ CARRO otorga testamento a favor de sus hijos TOMÁS y CARMEN, ante el notario lucense Pedro Menéndez García del Busto.
Acredita el notario que Tomàs Pérez Carro, de “unos ochenta y dos años de edad, casado, industrial, natural de Santa Coloma de Somoza, partido judicial de Astorga, provincia de León, está domiciliado en Calle San Pedro, 66, y es hijo legítimo de José y María Antonia, difuntos.”
Presenta cédula personal clase séptima, tarifa tercera, por alquileres, expedida en Lugo el 18 de julio del corriente año, con el número 5.982.
Dice: “que es católico y en tal concepto ordena que todo lo relativo a entierro y sufragios por su alma se ajuste a los ritos de la religión Católica, Apostólica Romana que éste profesa, y todo ello lo ordenará su esposa Vicenta García Carro, y a falta de ésta, lo realizará su hijo Tomás, a los que nombra albaceas con prórroga del tiempo que les sea preciso del término señalado por la Ley para el albaceazgo”.
Declara estar casado con Vicenta García Carro, de quien tiene los hijos Carmen y Tomas Pérez García, a los que instituye herederos.
Firman como testigos Juan Real Veloso, Fernando Rivas Tella y José Corral Fernández, mayores de edad, empleados y vecinos de Lugo.
En Certificado de últimas voluntades, expedido el 6 de octubre de 1944, se hace constar que Vicenta García Carro, natural de Somoza, hija de Francisco y Josefa, casada con Tomás Pérez, había otorgado testamento en Lugo, el 21 de noviembre de 1935, ante el notario Pedro Menéndez.
